Un retrato de un anciano maestro zen japonés que encarna un fuerte sentido de sabiduría y tranquilidad. Lleva gafas de sol redondas y oscuras, y tiene una barba y un bigote bien recortados de color blanco. Su cabello es corto y también blanco, con signos visibles de adelgazamiento. El hombre viste lo que parece ser una chaqueta tradicional de color oscuro, lo que sugiere un estilo simple pero refinado. El fondo es de un vibrante color naranja, proporcionando un fuerte contraste que resalta sus rasgos y le da a la imagen una sensación artística casi monocromática. Su expresión es serena y tiene un aire de contemplación y profundidad, lo que podría indicar su identidad como maestro zen, alguien profundamente arraigado en la meditación y las prácticas espirituales.