Una hermosa y vasta pradera salpicada de suaves nubes blancas y flores brillantes bajo un cielo azul despejado. En el centro del primer plano se encuentra una adorable niña pequeña con un disfraz de oveja esponjosa y una suave sonrisa en su rostro. Su disfraz tiene una capucha de lana con pequeñas orejas de oveja y cuernos, y su atuendo es de color blanco y rosa pastel, imitando la textura del vellón de un cordero. Ella está rodeada de flores, su cabello y el dobladillo de su vestido ondeando con la suave brisa. El paisaje detrás de ella son colinas verdes onduladas, ríos brillantes y montañas a lo lejos. El ambiente en general es sereno, caprichoso y lleno de encanto.