Una pintura al óleo hiperrealista, con un fondo blanco que presenta un ojo asomándose a través de papel rasgado con la forma de la cara de un artista en tinta negra, capturando detalles intrincados y texturas en un lienzo blanco limpio. El ojo refleja un profundo miedo y ansiedad, brillando sutilmente con intensos matices ámbar, mientras que los colores monocromáticos en gris proporcionan un fuerte contraste para resaltar el sujeto contra un fondo simple pero impactante, transmitiendo emoción a través de características faciales expresivas y una profundidad de campo que añade carácter.