Un paisaje desértico desolado y vasto que se asemeja a las ruinas de la película 'Dune'. La escena está dominada por estructuras antiguas de piedra que se elevan, parcialmente colapsadas y erosionadas por el tiempo. Una tempestad de arena en espiral sopla a través del terreno, creando una atmósfera brumosa y sobrenatural. En medio de la arena y el polvo, una silueta solitaria de una niña se erige, su figura apenas visible a través de los vientos que giran. El viento atrapa su capa, añadiendo al sentido de misterio y soledad. El cielo arriba es un degradado de naranja profundo y azul oscuro, significando ya sea el atardecer o el amanecer. Composición cinematográfica, alto contraste, iluminación intensa y profundidad atmosférica, evocando una sensación de inmensidad y abandono.