Un niño pequeño camina por una escalera interminable que se eleva hacia el cielo, desapareciendo entre las nubes. Lleva un traje rojo con 10 patrones circulares amarillos. Sobre su hombro, lleva un palo similar al que se ve en la carta del Tonto del Tarot. Un pequeño perro lo persigue juguetonamente desde atrás. La escena está dibujada en un estilo de marcador, con líneas audaces y colores vibrantes, lo que le da un toque artístico y dibujado a mano. La atmósfera sigue siendo surrealista, con una luz suave y un cielo soñador que rodea la escalera, creando una sensación de infinito y aventura.